Una temporada más llega a nuestras manos una nueva entrega de la espectacular WWE, demostrando el gran trabajo que desde Yuke’s y Visual Concepts llevan haciendo desde que 2K Games se hiciera con la licencia que era propiedad de la maltrecha THQ.
Este año viene cargado de novedades, como por ejemplo un nuevo juego, un potencial técnico que mejora con cada entrega, y ante todo, unas mejoras jugables que cada vez lo hace más accesible al jugador, y más completo como juego de lucha libre.
El primer punto donde nos queremos parar es sin duda el apartado jugable. Mencionar que regresamos a este apasionante mundo lleno de posibilidades de lucha, cantidad de luchadores, y un sinfín de opciones que nos permitirá disfrutar horas y horas de un universo tan especial. Y es que como suele ser habitual WWE nos llega cargado de modos de juego y posibilidades de combates que puede llegar a saturar a cualquiera, ya que es tan abrumador que seguramente pasemos días hasta que consigamos entender y descubrir todos lo que el juego puede aportar.
Entre estas opciones, destaca por encima de todos los diferentes modos jugables, de los cuales nos gustaría hablar un poco, ya que son la esencia de esta edición, y de la franquicia en general.
El primero, y más llamativo, es sin lugar a duda el modo Mi Carrera. Un modo en el que tendremos que crear y evolucionar a un luchador, para que consigamos hacer de él una de las grandes estrellas que forman el plantel de la WWE. Pero esto no lo hacemos solo luchando, si no que se ha incluido una especie de pseudo historia, que nos llevará a demostrar nuestros poderes de cháchara fuera del cuadrilátero. Una charlas que nos crearán nuestra personalidad dentro de la empresa, y que nos dará la elección de escalar hasta lo más alto de la forma y maneras que nos apetezcan.
Otro de los grandes modos creados para la ocasión es el Road to Glory. Un modo online, en el que nos la tendremos que ver contra otros jugadores con nuestro personaje creado, para entrar en la lucha por estar lo más arriba posible dentro de un ranking mundial. Y en el que sobresale por encima de todo, los retos semanales que una vez cumplidos nos permitirán participar en grandes eventos mundiales que nos han sorprendido lo bien llevados que están.
Por último, y como modo más importante, no podemos dejar de hablar de Universo WWE. Un curioso modo en el que nos encontramos siendo el manda más de este mundillo, controlando las diferentes marcas y a los luchadores. Gestionando con ello desde los combates, pasando por los títulos, e incluso los organigramas que poseen cada una de las diferentes ligas. Entretenido y original, y que nos hace sentirnos como un gran magnate de la WWE.
Otras de las novedades más notorias dentro del apartado jugable destacan; la incorporación de un sistema de sumisión gestionado mediante Quick Time Event, o la posibilidad de poder elegir de qué forma agarrar al contrario, lo que le da más credibilidad y realismo a las luchas cuerpo a cuerpo.
En lo que se refiere al número de luchadores que podremos contar para darnos de golpes en un ring, hay que decir que alcanza la cifra de más de un centenar de ellos. Siendo muchos de ellos desbloqueables a medida que avanzamos en el juego. Siendo de esperar que este grupo de luchadores se aumente gracia a los diferentes DLC que lance la compañía.
Uno de los puntos fuertes, especialmente para los muy comidos de la cabeza con este mundillo, es el magnífico editor que ofrece el juego. Un editor que nos permite desde personalizar a los luchadores y crearlos desde cero. Hasta hacer las entradas más espectaculares nunca vistas para anunciar nuestra llegada al ring. Es intuitivo y muy completo, absorbiendo horas y hora para poder personalizar nuestro personaje a nuestro gusto.
Pasemos al apartado gráfico, donde nos encontramos ante una edición que ha mejorado bastante dentro de este apartado, dando un buen salto de calidad respecto a la edición anterior. Y es que el diseño de personaje ha mejorado bastante, siendo algunas unas autentica gozada de realismo. Por otro lado, los escenarios siguen manteniendo un muy buen nivel de realismo, teniendo vida cada rincón de ellos, y siendo capaz de trasladar el ambiente que hay en un pabellón deportivo a nuestra pantalla. Las animaciones siguen mejorando con el paso de los años, siendo cada vez son menos robóticas, más cuidadas y reales.
A nivel sonoro nos encontramos con un trabajo notable. La banda sonora está compuesta por temas muy potentes de todos los géneros musicales. A lo que le acompaña los siempre sobresalientes efectos sonoros y ambientales que envuelven los combates. Para terminar hablando de los más que notorios comentaristas que le dan vida a la retrasmisión del combate.
Eso sí, como punto feos, deciros que el juego llega doblado a ingles, pero solo los comentaristas, ya que cuando entremos en momentos donde hay partes narrativas del juego, nos encontraremos a dos hombres moviendo los labios y mostrando subtítulos en castellano bajo de ellos.
En definitiva, sólo nos queda confirmar que 2K Games sigue mimando a la franquicia de lucha años tras año, escuchando lo que los fans van solicitando para mejorar con cada entrega. Sin lugar a dudas, estamos ante el juego más completo de la franquicia, con más posibilidades, con una jugabilidad más pulida y asequible para cualquier tipo de jugador que sea fan o no de la WWE.