Ubisoft reinventa su gran saga sandbox con un spin-off bajo el sobrenombre de Primal, logrando alzarse como uno de los juegos más frescos que hemos analizado en la web y que sorprende por sus novedades pero sobretodo con esta nueva trama centrada en la prehistoria.
Far Cry Primal nos situará a 10.000 años antes de Cristo junto a Takkar y la tribu de los wenja en medio de Europa Central, en la llamada Tierra de Oros. Los wenja, un grupo de cazadores y recolectores que buscan establecerse tras la última glaciación, viven en paz en este magnífico lugar, pero no estarán solos. Los wenja, débiles pero resistentes, están amenazados por dos tribus rivales: los izila, pirómanos y cultistas del fuego, y los udam, brutales caníbales.
Nos pondremos en la piel de Takkar, un wenja que tendrá la habilidad de controlar a toda la fauna de la época, un don que le lleva a liderar a los wenja y defender la seguridad de su pueblo. Este será el principal argumento narrativo de Far Cry Primal, una trama que tendrá a la supervivencia por encima de todo, por lo que tendremos que luchar, cazar, recolectar y explorar nuevos puntos del mapa.
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Como suele ser costumbre en la franquicia, los villanos tendrá un papel protagonista por encima de nuestro personaje principal, dividiéndose en esta entrega en dos: Ull, líder de los udam y Batari, líderesa de los izila. El protagonismo en esta entrega se reparte también entre secundarios como Sayla, la recolectora; Tensay, el chamán y por supuesto los dos líderes tribales rivales.
Hablemos del mapa, cuya dimensión es prácticamente similar a la vista en la cuarta entrega, el cual será tan extenso como para disfrutar explorando cada rincón durante las aproximadamente 12 horas de desarrollo de la campaña. Pero para ser sinceros, Tierra de Oros destaca por su gran variedad de vegetación y fauna más que su extensión. Estaremos plenamente interactuando con hervíboros como tapires, mamuts, ciervos o cabras, además de depredadores, desde perros salvajes a letales tigres dientes de sable. La fauna, bastante variada, ayudará a recrear un paisaje salvaje muy realista, que nos traslada perfectamente a esta época del ser humano.
Todo lo que necesitamos durante el juego, podremos conseguirlo de la naturaleza, teniendo que estar constantemente recolectando materias primas para evolucionar nuestro personaje, mejorar armas y avanzar en la historia. Esto es inevitable pese a que muchos usuarios no les guste, ya que tendremos que reabastecernos de comida para mejorar la salud y de munición para nuestras primitivas armas, debido a que no encontraremos como en pasadas entregas munición esparcida por el suelo.
Cuando atacamos o cazamos, tenemos la opción de pasar inadvertidos gracias al sigilo, característica que se verá potenciada gracias a la visión del cazador, habilidad que nos facilitará identificar desde materias primas hasta enemigos o fauna cercana. Por supuesto existe la opción de no usarla para los más puristas a la hora de jugar, pero sin lugar a dudas se trata de una habilidad que dará mucho juego a lo largo de la historia.
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La evolución de las habilidades como cazador tiene lugar a través de puntos de habilidad, los cuales se conseguirán completando todo tipo de misiones. Dispondremos de ocho ramas de habilidades a las que tendremos acceso a través de ciertos personajes:
- Supervivencia: esta rama potencia nuestra salud, capacidades curativas, sigilo o agilidad y está relacionada con Takkar.
- Recolección: potencia nuestra habilidad de interacción con el terreno y los recursos que encontramos en él
- Señor de las bestias: potencia nuestra capacidad para domar bestias más poderosas y mejorar las habilidades de nuestro búho.
- Caza: mejoraremos nuestra capacidad para crear munición, marcar enemigos o recargar armas.
- Lucha: aprenderemos a hacer eliminaciones más letales o montar bestias para desplazarnos más rápido
- Creación: todo lo relacionado con mejorar nuestra habilidad para hacer trampas o potenciar los beneficios de los alimentos.
- Habilidades Udam: habilidades especiales de resistencia cuerpo a cuerpo.
- Habilidades Izila: habilidades relacionadas con el fuego y su uso en combate.
Por último, tendremos la gestión de nuestra aldea. En un primer lugar sólo estaremos acompañados por Sayla, la recolectora, pero conforme vayamos ayudando a los wenja perdidos por el mapa o que se encuentren en zonas poco seguras, iremos aumentando la población aproximadamente el centenar de personas. Esto nos servirá además de aumentar la experiencia, para sobre todo mejorar los recursos que obtenemos día a día y no tener que perder demasiado tiempo en recolectar materias primas. Realmente más relevante en este aspecto es reclutar a algunos wenja especiales que nos permitirán desbloquear habilidades únicas en nuestro protagonista. La gestión de la aldea muy sencilla, basándose en mejorar las cabañas de estos sujetos especiales recolectando materias primas especiales, consiguiendo gracias a esto desbloquear nuevas mejoras.
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La característica incluida en Far Cry Primal que más nos ha sorprendido ha sido la doma de bestias. Podremos dominar a determinada fauna para que nos acompañen como compañeros en nuestras cacerías o a luchar contra las tribus rivales. Los animales que podremos domar irán desde pequeños perros salvajes a peligrosos tigres dientes de sable. La verdad es que la inteligencia artificial de nuestros amigos peludos funciona notablemente, otorgando a nuestro compañero un papel notable y haciendo que nos olvidemos de la ausencia de la característica multijugador.
Entrando a hablar del apartado técnico, podemos decir que más destacado es su diseño artístico, siendo todo muy creíble, con mucha variedad y una ambientación a la altura. Eso sí, el motor del juego pide un cambio a gritos, siendo el mismo reciclado de anteriores entregas.
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Far Cry Primal está lejos de ser el mejor juego de la saga, pero se ha convertido en un soplo de aire fresco con una ambientación difícil de recrear y que propone retos interesantes. Sin lugar a dudas, será una experiencia para un solo jugador en un mundo abierto que nos mantendrá pegados a la pantalla durante aproximadamente 12 o 14 horas. Los amantes de la saga se verán atraídos por su ambientación y porque su base sigue siendo la misma, con esencia Far Cry.